James Dean es uno de los actores más populares en la iconografía rosa.
Nació en Indiana (USA) en 1931 y murió en 1955 a la corta edad de 24 años en un accidente automovilístico. Sus tres películas han dejado una enorme huella en el mundo del cine: Al este del edén (1955), Rebelde sin causa (1955) y Gigante (1956).
Sobre el hecho de que el actor tuvo relaciones gays presunta hay más que rumores, aunque algunos de ellos parecen más verídicos que otros. Entre otros, se cree que mantuvo un ídilio con Sal Mineo, durante el rodaje de Rebelde sin causa (1955).
En todo caso, el actor jugaba a la provocación. Cuando se le preguntó a James Dean por su orientación éste dijo:
Yo no soy gay, pero tampoco voy por la vida con las manos atadas a mis espaldas.
(Riese, Randall, The Unabridged James Dean: His Life and Legacy from).
Al este del Edén (1955), su primera película, es todo un drama, sobre la dificultad para hallar nuestro lugar en el mundo. El protagonista James Dean añora saber quién es su madre, la cual les abandonó cuando su hermano y él eran muy pequeños, a causa de lo estricto que era su padre. La novia de James Dean Abra (excelente Julie Harris) será el apoyo que necesita el guapo actor para estabilizar un poco su ajetreada vida.
La película Al este del Edén (1955) marcará el fulgurante ascenso de James Dean a lo más alto del cine, logrando superarse a sí mismo en su segunda película.
Escena romántica de la película Al este del Edén (1955) |
Rebelde sin causa (1955), su segundo film, es una de las películas clásicas del cine pandillero por excelencia. James Dean encarna al joven outsider que busca abrirse su camino entre las hipocresías y mandamientos de una sociedad quebrada, donde existe una brecha generacional.
James Dean consigue un registro de verdadero carisma, sólo dos años después de que Marlon Brando y su Salvaje (1953) revolucionaran el cine de las pandillas. El actor da vida a un personaje incomprendido, solitario, pero necesitado de cariño, como cualquiera de nosotros. Si alguna vez la rebeldía juvenil en el cine tuvo un carácter muy seductor, Rebelde sin causa (1955) es el ejemplo más perfecto.
Gigante (1956) es la última película de James Dean, que se estrenó al año siguiente de que muriera muy precipitadamente. En ella, el actor interpreta a un joven terrateniente que verá como su fortuna crece sin límites gracias al descubrimiento de petróleo en sus tierras. Ser capaz de codearse en pantalla con la mismísima Elizabeth Taylor y Rock Hudson, reconocida estrella gay, denota que James Dean era un monstruo de la pantalla. Sin embargo, el regular maquillaje y la mejorable caracterización no ayudaron esta vez a la interpretación del actor, que fue aun así nominado al Oscar por segunda vez consecutiva (la primera fue por Al este del Edén).
A los amantes de James Dean les podrá gustar el reciente estreno del biopic del actor Joshua Tree, 1951: A Portrait of James Dean (2012), en la que se analiza la complicada y ajetreada vida del intérprete y se introduce en sus romances gays.
Fotograma de la película Joshua Tree, 1951: A Portrait of James Dean (2012) |
Al igual que River Phoenix, otro icono del cine gay, James Dean moriría muy pronto, algo que aumentaría su leyenda como actor. Si River Phoenix acabó sus últimos días sumido en las drogas, hoy día se apunta a que James Dean arrastraba graves traumas de su infancia por abusos, algo que ha revelado hace escasos años Elizabeth Taylor, su querida amante de Gigante (1956).